dilluns, d’octubre 01, 2007



El asesino del Che, la Operación Milagro y los médicos cubanos
Salim Lamrani
Rebelión
Revisado por Caty R.


Mario Terán, antiguo suboficial jubilado tristemente famoso por haber ejecutado al legendario guerrillero Ernesto Che Guevara el 9 de octubre de 1967 en la escuelita de La Higuera en Bolivia, vivía en el más completo anonimato en Santa Cruz. Hundido totalmente en la indigencia, subsistía sólo con su miserable pensión de antiguo soldado y había perdido la vista, víctima de una catarata que no había podido curar, por falta de recursos (1).


En 2004 el presidente cubano Fidel Castro lanzó una amplia campaña humanitaria continental que lleva el nombre de Operación Milagro, apoyada por Venezuela, que consiste en operar gratuitamente a los latinoamericanos pobres que sufren de cataratas y otras enfermedades oculares. En 30 meses, cerca de 600.000 personas de 28 países, incluso ciudadanos estadounidenses, recobraron la vista gracias al altruismo de los médicos cubanos. El objetivo anunciado es operar a 6 millones de personas para 2016 (2).


La elección de Evo Morales como presidente de la República de Bolivia en diciembre de 2005 y su voluntad de emprender una política social destinada a mejorar el bienestar de una de las poblaciones más pobres del continente, ha permitido que los bolivianos accedieran al programa humanitario que lanzó Cuba. Cerca de 110.000 bolivianos han podido recobrar la vista sin pagar un solo centavo (3).


Entre éstos se encuentra Mario Terán, quien pudo deshacerse de su grave dolencia gracias a los médicos cubanos. Pablo Ortiz, periodista boliviano que trabaja para el diario El Deber de Santa Cruz, contó la historia: “Terán tenía problemas de cataratas y fue curado en la Operación Milagro, por médicos cubanos, totalmente gratis”. Luego dio más detalles: “El tipo es un perfecto desconocido. Nadie sabe quién es. Está en la ruina y se presentó en el hospital de Operación Milagro, nadie lo reconoció y fue operado. Nos lo contó su propio hijo, que fue al diario para hacer un agradecimiento público [...] Fue en Agosto pasado [2006]” (4).


A veces la historia reserva algunas sorpresas. Así, el asesino del Che fue curado por médicos enviados por Fidel Castro, el más fiel e íntimo compañero del “guerrillero heroico”. Terán debe su vista a los emisarios de la salud que siguen el ejemplo internacionalista del hombre a quien mató.


Según el antiguo agente de la CIA Félix Rodríguez, que participó en la captura del Che, Terán se presentó voluntario para ejecutar al líder rebelde. Antes había asesinado a sangre fría a todos los demás prisioneros (5). Pero frente al Che le faltó el valor:


“Cuando llegué al aula el Che estaba sentado en un banco. Al verme dijo:


-Usted ha venido a matarme.

Yo me sentí cohibido y bajé la cabeza sin responder. Entonces me preguntó:

-¿Qué han dicho los otros?

Le respondí que no habían dicho nada, y él comentó:

-¡Eran unos valientes!

Yo no me atrevía a disparar. En ese momento vi al Che grande, muy grande, enorme. Sus ojos brillaban intensamente. Sentí que se me echaba encima y cuando me miró fijamente, me dio un mareo. Pensé que con un movimiento rápido, el Che podría quitarme el arma.

-Póngase sereno –me dijo– y apunte bien, ¡va usted a matar a un hombre!


Entonces di un paso hacia atrás, hacia el umbral de la puerta, cerré los ojos y disparé la primera ráfaga [...]. Yo recobré el ánimo y disparé la segunda ráfaga, que lo alcanzó en un brazo, en el hombro y en el corazón. Ya estaba muerto” (6).


En vísperas del cuadragésimo aniversario de su desaparición y a pesar de la execrable campaña mediática internacional destinada a empañar la imagen de uno de los más grandes revolucionarios de la historia del siglo XX, el ejemplo del Che permanece “grande, muy grande, enorme” y sigue brillando “intensamente” gracias al sacrificio de decenas de miles de médicos cubanos que, en el anonimato de su acción heroica por los cuatro puntos cardinales, persisten en la creencia de que otro mundo, menos cruel, es posible.

Notas
(1) Héctor Arturo, «Che vuelve a ganar otro combate», Granma, 29 de septiembre de 2007.
(2) Operación Milagro, «Página Principal», 28 de septiembre de 2007.
http://www.operacionmilagro.org.ar/ (sitio consultado el 30 de septiembre de 2007). Para los ciudadanos estadounidenses que se beneficiaron del programa humanitario véase Prensa Latina, «Oftalmólogo estadounidense reconoce valor de Operación Milagro», 19 de enero de 2007.
(3) Operación Milagro, «Bolivia. De las tinieblas a la luz: Operación Milagro devolvió la vista a más de 108 403 pacientes», 28 de septiembre de 2007.
http://www.operacionmilagro.org.ar/ (sitio consultado el 30 de septiembre de 2007).
(4) Juan Pablo Meneses, «¡Primicia Mundial! Entrevista a Pablo Ortiz», Crónicas Argentinas, 11 de octubre de 2006.
(5) Claudia Márquez, «El Guerrero de las sombras. Entrevista a Félix Rodríguez», El Veraz, 19 de agosto de 2005.
(6) Mario Terán, «Extractos», sin fecha.
http://fotolog.terra.com.ar/desdelaterraza:26 (sitio consultado el 30 de septiembre de 2007).
Salim Lamrani es profesor, escritor y periodista francés especialista de las relaciones entre Cuba y Estados Unidos. Ha publicado los libros: Washington contre Cuba (Pantin: Le Temps des Cerises, 2005), Cuba face à l’Empire (Genève: Timeli, 2006) y Fidel Castro, Cuba et les Etats-Unis (Pantin: Le Temps des Cerises, 2006).

7 comentaris:

Anònim ha dit...

Esta mañana he escuchado esos hechos en la Ser, y me ha sorprendido mucho. El problema es que esa persona todavía tenga la voluntad de aceptar recuperar la vista a costa del pueblo cubano.
Pero como dijo el propio Che:Si no hay café para todos, no habrá para nadie.

Anònim ha dit...

Cuba i els cubans també es mereixen viure en democràcia. Per una Cuba democràtica i lliure!

Anònim ha dit...

Tens molta raó Cuba és mereix viure en llibertat sense imposicions de Washington. Sense el bloqueig econòmic que estan patint per part dels EUA i sobretot decidint ells mateixa sobre la seua forma de govern. I en aquestos moments el poble cubà està amb la revolució, perquè si no fos així Fidel ja haguera estat derrocat fa molts anys.

Per tant la Revolució no serà tant dolenta com les potències neoliberals ens volen pintar (Sanitat pública, educació pública, uns horaris laborals compatibles amb una vida digna...).

Tanmateix en el seu moment i ara mateix també tinc ben present que una de les coses més inhumanes que pot fer un Estat també ha estat present a Cuba; la pena de mort. Aquesta no s'aplica tan sovint com als EUA, ni molt menys!!!.
Tot i això farà uns anys que aquesta fou exercida sobre certs disidents, complices de l'espionatge nordamericà. Aquesta serà la gran assignatura pendent de Fidel davant la història. Tot i que ha estat un dels líders més importants de l'esquerra del segle XX i part del segle XXI.

Cuba lliure sí
Cuba socialista sí
Cuba sense bloqueig econòmic sí
Cuba lliure de l'invasor ianqui sí
però
Cuba sense pena de mort també

Anònim ha dit...

I Cuba democràtica? Eixa no?

Anònim ha dit...

A Fidel el va posar el poble mitjançant un moviment revolucionari, i aquest ara continua en el govern gràcies al recolzament de la voluntad popular.

Et torne a repetir si no fos així Fidel ja no seria president de Cuba.

Anònim ha dit...

la veritat de Cuba: http://es.youtube.com/watch?v=jjprx4d4ERs&mode=related&search=

Anònim ha dit...

El millor de tot el final, QUE DIOS SALVE A CUBA...però del DIABLE IANQUI!!!!!!!